HISTORIAS DE ESTA LETRINA

Historias de ésta letrina

martes, 9 de octubre de 2012

LOS BUENOS NO SOMOS MÁS


No quisiera volver a leer o a escuchar que “los buenos somos más”, como si los que aseguran eso supieran que los buenos son muchos. Yo no me considero bueno, tampoco muy malo, sino displicente, y despreocupado de afectar a alguien por las cosas que hago. Eso no me hace malo, no como alguien que mata y descuartiza a otro con una motosierra, pero no me hace bueno, como alguien que sin importar si está enfermo o muy cansado, da su puesto a una mujer en un bus.





Yo me hago el dormido, o miro por la ventana, para no tener que dar el puesto a las señoras, y si bien esa acción no es vista como buena, para mi no es mala. La señora qué va a saber si yo estoy cojo, enfermo ó cansado. Yo simplemente me cruzo de brazos, cierro los ojos y me encojo de hombros lo que más pueda, para verme muy cómodo y que no me jodan la vida. Que tal si digamos, uno coge un bus en el portal del norte, y su destino es el barrio El Tunal. Fijo en la 134 le piden el puesto a uno, y toca estar de pie hasta la calle 13. Igual siempre hay alguien que cede su lugar, y hasta hay señoras osadas que exigen el puesto al primer macho saludable que vean sentado.


Tampoco me considero bueno, porque soy egoísta, tacaño y vulgar. Eso ha sido un impedimento para algunas cosas, pero pensándolo bien, todas las personas tienen por lo menos tres defectos claros, así como yo. Lo que destaco de mi, es que no soy, por ejemplo, ladrón ni violador. Eso es un plus, en un país donde la mitad de la población roba, y donde diariamente son violadas 20 personas. Si quisiera me volvería ladrón o violador, pero no sería fácil. Para robar hay que ser sigiloso, temerario, tranquilo y agresivo a la vez, y veloz. Yo puedo ser todo lo que quieran, menos veloz, y solo por eso no podría ser ladrón; atracador de calle, de cuchillo, me refiero.


Hay gente que se creen buenos, porque cada 6 meses hacen un mercado de $50.000 y lo llevan a una iglesia. Camino a casa, se están convenciendo que son personas buenas, que ayudan, que se preocupan por los demás, por ayudar a la sociedad que se ha venido a menos por las drogas, el rock and roll y los mensajes subliminales. Y entonces llegan a la casa, golpean a sus esposas y a sus hijos, se van a un putiadero y se gastan $400.000 en una botella de whisky y una puta. O las señoras, llevan el mercado, llegan a la casa, prenden el carro, y se van a Zara a gastarse $1’000.000 en unos mochos tipo Carlos Vives y una blusa “de tiritas”. Por dar una miseria la gente cree que está cambiando el mundo.


Uno no es bueno por no ser narcotraficante, ni mula, ni ratero, ni sicario. Los que dicen que los buenos somos más están equivocados, porque todos en éste país de alguna forma somos malas personas, mezquinos o envidiosos, rateros o asesinos. Los colombianos nacimos con el gen del mal, con la semilla de belcebú en la sangre. Cualquier oportunidad y el colombiano se vuelve mula, traqueto, sicario, puta, ladrón, paramilitar, etc. Lo importante es no encontrar esas oportunidades, o no aprovecharlas. Si las personas que aseguran que “los buenos somos más” se dieran cuenta qué clase de personas somos los colombianos, desistirían en su afirmación. Por favor, si usted es de los que aseguran eso de los buenos, revísese bien,  probablemente sea igual de mala persona que yo, y que el resto de los que nacimos en esta cloaca.

4 comentarios:

  1. Entré a curiosear su blog y debo decir que no es nada nuevo ni original. Aunque supongo que no le interesa ser original. Hoy día lo políticamente correcto es señalar que esto por acá es lo peor, que los políticos se roban todo, y que los empresarios son unos tipos que se reunen en un cónclave para ver como joden a los esclavos. Por ahí se puede meter una puya a la religión y sus pederastras. Eso sí, para ser correcto no se puede dejar de decir que la cultura mafiosa y la del vivo nos definen. Por último, le tiro una chiva, puede rematar con la frase esa que le atribuyen a Einsten de que hay dos cosas infinitas, el espacio y la estupidez, y no-sé-qué-más-papurruchadas.

    Hace algunos años, cuando salió el best-seller "El Código Da Vinci", empezaron a salir cientos de libros iguales; y alguien se hizo una página muy graciosa donde ud ponía unos datos y al azar le generaba ideas para libros similares, como por ejemplo: "Ud es descendiente de carlomagno, pero no lo sabe, y unos nazis radiactivos han sobrevivido a la segunda guerra mundial hasta nuestros días. Estos tienen en sus manos un arma secreta para arrasar con el mundo, pero ud., y una chica que conoce por ahí, estan destinados a salvar el planeta de la devastación."

    Creo que hay una de esas para blogs colombianos políticamente correctos como el suyo.

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  2. Gracias por entrar en mi espacio. Si bien tiene razón, y en los últimos tiempos se han acrecentado los espacios de opinión en donde se critica el modelo social, político y económico en el que vivimos, no me baso en ese tema únicamente para escribir. No me creo capaz de escribir acerca de la solución que se le puede dar a la actualidad corrompida e injusta en la que nos tocó nacer, porque no existe tal. Decir que los colombianos buenos somos más no sirve de nada, no arregla la corrupción, ni el espíritu individualista y mezquino del colombiano promedio. Tampoco creo que haga daño decir algo que es una verdad para unos, como yo, así esté en desacuerdo con otros. Siempre es agradable leer opiniones opositoras a lo que piensa uno, y más si son con respeto, como la suya.

    Finalmente, seguiré escribiendo acerca de esos temas, y de otros, así sea simplista y pesimista, así no aporte nada, porque mi intención no es aportar "mi granito de arena" para que colombia sea mejor. No me interesa que éste país sea mejor, ni su gente, ni su imagen. Gracias de todas formas por leerme y opinar respetuosamente.

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  3. El problema no es solo de los colombianos,el hombre en general es un rebelde y nos inclinamos naturalmente a lo que es claramente malo,cito el diagnostico que DIOS ha dado del hombre: Romanos 3:10 Como está escrito:
    No hay justo, ni aun uno;
    11 No hay quien entienda,
    No hay quien busque a Dios.
    12 Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles;
    No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno.
    13 Sepulcro abierto es su garganta;
    Con su lengua engañan.
    Veneno de áspides hay debajo de sus labios;
    14 Su boca está llena de maldición y de amargura.
    15 Sus pies se apresuran para derramar sangre;
    16 Quebranto y desventura hay en sus caminos;
    17 Y no conocieron camino de paz.
    18 No hay temor de Dios delante de sus ojos.
    Jeremías 17:9 Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?
    Génesis 6:5 Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.
    6 Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón.

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  4. Definitivamente yo creo que si Ud o yo somos buenos o malos, depende de la perspectiva y de la situacion que se este viviendo, yo en lo personal por ejemplo con el asunto de los buses, solo doy mi silla en casos extremos, solo doy la silla o mi espacio si esta pèrsona esta en serio jodida EJ una viejecita que no se puede ni tener(Gente para la cual fue una proeza treparse en el bus) o caso afines. No me interesa para nada si la q me pide la silla es una mona con tetas como mentiras en el congreso y piernas de oro jamas cedo la silla a gente asi.

    Mi consuelo es que asi yo este urgido de una silla a mi nadie me la cede asi que todo tiene su equilibrio jajaja

    Saludos

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